muchas y ninguna

Cuchicheos: me espían entre los follajes de las letras.
Octavio Paz

15 nov 2013

Gravedad

El cielo, ciertos días transparentes,
baja hasta las terrazas 
y se asienta al sol.
Cuando se aleja
me tiro en el cielo a nadar
azul, azul, azul
y caigo 
en la tierra, un desierto,
un patio, un semáforo
mi silla,
caigo
¿qué cumbre o qué hondura podrá
permitirme saltar?


Implacable, invencible,
demasiado fuerte es la fuerza de gravedad



13 nov 2013

auxilio

A las dos de la mañana de un día de julio del  deseado  año de las cornucopias
el Polichinela me asaltó
¡qué revuelo de plumas!
y mis huesitos…
chupados por los dueños del carnaval

Pierrot, Pierrot,
¿dónde estás?

11 nov 2013

Azul

Sobre el fondo azul celeste tan común como difícil de creer
materializan las nubes un espacio contenido,  
temprano suben a colgarse de una altura posible y
se mueven despacio con sus cúpulas, 
sus torretas, sus ancas formidables,
sus tetas de aire, polvo y agua
Hacen posible la idea de cielo
e inscriben la de amor  
al regresar
un día y otro
con diversos signos o
al colmar el azul 
de un talante negro
presagiante

igual al del 
amor
cuando perece

9 nov 2013

Palabras poderosas




Unas pocas palabras y
las estrellas caen , una a una,
produciendo agujeros, astrónomos desconcertados
y fúnebres rugidos en la corteza de lo seguro.

Unas pocas palabras y
las estrellas se apuran a trepar por escalas de nubes,
una a una, 
para ocupar su lugar en las constelaciones como si nada,
nada hubiera pasado

Yeguita

La yegua negra tenía una mancha blanca en la frente, pecho blanco y patas algo cortas
¿cuando la traen? ¿quién?, ¿hasta cuándo?, pregunta ella, impaciente
la doma, el amanse, el cabestro, las riendas, ¿a quien no se amaestra en este mundo?
Ponemos los huevos en la fuente, hacemos panqueques con dulce de leche.
Ella espera que pase la nieve en la ventana y
 en la ventana espera ver crecer las flores de amancay
compra montura, comida y paja
clava los troncos del corral, toda una tarde y todo el otro día
¿y el boyerito?, pregunta.
Ella espera, impaciente.

La yegua llega en un carrito tras un coche,
vienen a verla los chicos desde 0,70 hasta los de 1,60 m.   
ella mueve sus orejas y los mira de perfil, paciente.
Ya hay tres caballos cercanos y otros tantos jinetes disponibles
van al río, al pueblo, al kiosco y a la escuela
van y van,  vienen y vienen
Ella trota, paciente.

Regresa la nieve a la ventana

Una noche alguien la roba,
el policía sigue el rastro hasta el caserío del Alto.
La habrán faenado, dice, rascándose una oreja
suele pasar, dice, paciente.

5 nov 2013

Estrellas - Versión II

Playa sin luna 
el farol enciende el fondo del mar  (metro y medio de cardumen deslumbrado)
remolino de cintas plateadas el balde

Comemos pescado frito con las manos 
en la arena oscura y fresca
y eso,
cruel, fatal
es tan alegre como comer estrellas